Los restos de los once uniformados que murieron el 9 de mayo de 2025 en un ataque armado en la región de Alto Punino, provincia de Orellana, llegaron a Quito la tarde del sábado para ser velados con honores militares en la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro.
Un avión C-130 de la Fuerza Aérea Ecuatoriana aterrizó en el aeropuerto Mariscal Sucre pasadas las 18h38, transportando los féretros. El momento fue transmitido en vivo por las redes sociales del Ejército Ecuatoriano.
Antes de su arribo a la capital, los cuerpos fueron despedidos en una ceremonia solemne en la provincia de Sucumbíos. El Grupo de Fuerzas Especiales 53 Rayo, con base en la frontera norte, rindió tributo a sus compañeros caídos en el cumplimiento de su deber.
"Con honores militares, parten hacia Quito los cuerpos de los soldados que entregaron su vida por el país", publicó el Ejército en sus redes sociales.
𝑪𝒐𝒏 𝒉𝒐𝒏𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒎𝒊𝒍𝒊𝒕𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒑𝒂𝒓𝒕𝒆𝒏 𝒉𝒂𝒄𝒊𝒂 𝑸𝒖𝒊𝒕𝒐 𝒍𝒐𝒔 𝒄𝒖𝒆𝒓𝒑𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝒔𝒐𝒍𝒅𝒂𝒅𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒎𝒖𝒓𝒊𝒆𝒓𝒐𝒏 𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒄𝒖𝒎𝒑𝒍𝒊𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒐 𝒅𝒆 𝒔𝒖 𝒅𝒆𝒃𝒆𝒓
— Ejército Ecuatoriano (@EjercitoECU) May 10, 2025
Sucumbíos| En un emotivo acompañamiento realizado desde el Grupo de... pic.twitter.com/K5YhnDci0j
Autoridades estuvieron presentes en el aeropuerto para recibir los restos de los militares.
Está programada una misa en su memoria para la mañana del domingo 11 de mayo, a las 08h00, en las instalaciones de la misma escuela militar donde se realiza la velación.
Los militares fueron asesinados durante un operativo de control contra la minería ilegal en Alto Punino, una zona selvática que ha sido foco de actividades ilícitas.
El presidente de la República, Daniel Noboa, declaró a los caídos como héroes nacionales y prometió justicia: “Vamos a acabar con los responsables”, afirmó.
Por su parte, el ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, manifestó que el ataque no fue solo contra los militares, sino contra el país entero. “Esta guerra continúa”, advirtió.