El expresidente del Consejo de la Judicatura, Wilman Terán, afronta un nuevo proceso judicial por su presunta participación en una trama de asociación ilícita vinculada a la liberación del exvicepresidente Jorge Glas en 2022.
La Fiscalía lo investiga junto con la exjueza Anabel Torres, dos abogados y un exfiscal, en una causa denominada Vidrio Libre.
La audiencia de formulación de cargos estaba prevista para la mañana del miércoles 5 de junio en la Corte Nacional de Justicia, pero no se instaló por fallas en el sistema de notificaciones. La diligencia fue reprogramada para el viernes 13 de junio, a las 08:30, según informó el conjuez Hernán Barros.
Este nuevo proceso penal se suma a la condena que ya enfrenta Terán por delincuencia organizada en el caso Metástasis. Actualmente, el exfuncionario cumple prisión preventiva en la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil.
La defensa de Terán, liderada por el abogado Alejandro Moreno, sostiene que su cliente no tuvo ninguna participación en los hechos, pues al momento de la liberación de Glas, en noviembre de 2022, él era juez de la Corte Nacional y no tenía injerencia directa en el caso.
El caso Vidrio Libre se relaciona con un habeas corpus otorgado por el entonces juez de Santo Domingo, Emerson Curipallo, que permitió la salida de Glas de la Cárcel 4 de Quito bajo la figura de “libertad provisional”.
Curipallo, quien firmó esa acción judicial, ya fue condenado por prevaricato en el caso Metástasis, y también recibió una condena por delincuencia organizada.
Con este nuevo proceso, Wilman Terán suma su cuarto caso penal en curso, lo que complica aún más su situación legal.
El delito de asociación ilícita está tipificado en el artículo 370 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) y se sanciona con una pena de tres a cinco años de prisión.
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Por su parte, el exvicepresidente Jorge Glas aún debe cumplir una condena acumulada de ocho años de prisión por los delitos de asociación ilícita y cohecho. Además, enfrenta un nuevo proceso judicial por presunto peculado relacionado con las obras de reconstrucción tras el terremoto de 2016.
A finales de 2023, Jorge Glas se refugió en la Embajada de México al advertir que la Fiscalía buscaba imputarlo en el denominado caso Reconstrucción. Pese a recibir asilo diplomático por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el presidente Daniel Noboa ordenó su captura mediante el asalto a la sede diplomática. Desde entonces, Glas permanece recluido en la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil.
No obstante, ayer Glas fue trasladado desde La Roca hacia un centro de detención en Quito, con el fin de comparecer de manera presencial este viernes ante el tribunal de la Corte Nacional de Justicia, que dará inicio al juicio por peculado.